En 2001 se produjo un hito importantísimo, un punto de inflexión que está reconfigurando la forma en la que nos alimentamos:la publicación del código genético. Ahora sabemos cómo intervienen los nutrientes en los procesos corporales a nivel molecular y ello posibilita gestionar directamente nuestra salud a través de la alimentación.
Hoy en día sabemos que una única intervención nutricional no es efectiva para todas las personas, debido a las diferencias interindividuales existentes, pero, en un futuro inmediato, gracias a la nueva línea de trabajo que la secuenciación del genoma ha abierto y el avance en las diferentes tecnologías ómicas, vamos a poder dirigir la alimentación hacia clústers de personas con características (patrones genómicos, microbiota intestinal) similares.
La gastronomía personalizada, o más exactamente, la nutrición de precisión, junto con la gastronomía personalizada, es ya una realidad. En el largo plazo, nos suscribiremos, seguramente, a alguna plataforma para recibir los productos más adecuados a nuestro organismo, desde donde nos harán llegar sugerencias que serán específicas para nosotros como ahora sucede con las series y películas.
Hay que mencionar que las tecnologías 4.0, como por ejemplo la inteligencia artificial, tienen un papel clave en este nuevo tablero de juego. Así, permiten obtener y gestionar multitud de datos que son necesarios para que esa alimentación de precisión sea posible. El reto que quizá nos queda es compartir esos datos para avanzar más rápidamente en esta línea, asegurando, obviamente, la privacidad de los mismos.
Para finalizar, debemos añadir un ingrediente más en esta reflexión. En 2050 será necesario alimentar a 9.600 millones de personas, lo que supondrá poner en práctica conceptos como la economía circular en toda su dimensión. La tecnología tendrá, por supuesto, un papel protagonista como facilitador de la transformación hacia ese nuevo paradigma. Y todo ello sin olvidar que gastronomía y disfrute van de la mano.
Basque Culinary Center ha sido el escenario de una velada única donde integrantes de Mahaia Kolektiboa se han reunido para reflexionar sobre el futuro de la excelencia culinaria y los retos de la gastronomía en Euskadi a través de una singular experiencia gastronómica. El encuentro celebrado ayer, 10 de febrero, ha representado un diálogo entre tradición e innovación que se ha expresado en cada plato.